Es lindo jugar con los colores, esos que se complementan y aquellos que chocan entre si. Pero sobre todo, es fantástico provocar realces con las texturas y los volúmenes que nos aporta la seda, cuando las fibras la sostienen de una forma u otra.
Esta pieza esta realizada en una sola capa de fibras de oveja merino, teñida en dos colores y sobre ella, el juego del que hablaba. La seda pongee 8 le da la presencia que el fieltro merece.
3 entretenidas horas de trabajo y un té...la mejor de las compañías.